Alojamientos para estancias largas en San Bernardo del Viento

Si andas buscando un espacio tranquilo para compartir en familia este ed tu lugar. Las fotos que se muestran en el anuncio son iguales a lo que vez en persona. habitaciones cómodas Amplias. Baños modernos y todo tipo de utensilios en la cocina junto a un refri y un congelador. La parrilla genial tiene todo para un asadito al lado del jacuzzi. Dos kioskos de palma uno con amhacas y el otro pegado a la cocina que esta a la entrada. todo es espacio que vez de patio es de la cabaña y es muy privado y tranquilo. tiene acceso a la playa con ranchos para el sol. Don Pacho el Facility Manager te soluciona todo tipo de problemas y hace que tu estadía sea más placentera. No hay sitios para compra cerca te recomiendo llevar todo desde San Bernardo donde hay un ARA a unos 15 minutos. seguro regresaremos. recomiendo este lugar 100%. si andas buscando privacidad. entorno natural tranquilidad. playa y varios ambientes este es tu lugar.

Karol y las personas del servicio Pacho y María, nos hicieron sentir como en casa, fueron 5 días maravillos para desconectarnos, compartir en pareja, compartir momentos felices con nuestros hijos pequeños, en una privacidad total. El frente de playa y el kiosko fueron mis favoritos ♥️ Recomiendo mucho este lugar para descansar y recargar pilas en familia. PD: atardeceres impresionantes ☀️

Recomendado. Excelente lugar para pasar unos días desconectado. El alojamiento cuenta con todas las comodidades básicas, muy limpias y cuidadas, áreas amplias, bien iluminadas, con mucha privacidad y tranquilidad. Las atenciones con la señora encargada doña Magdalena siempre fueron cordiales y amigables. Si se presenta la oportunidad, volveremos.

Casa Uvita fue simplemente espectacular. La cabaña, tal como lo mostraban las fotos, estaba impecable, acogedora y equipada con todas las comodidades necesarias para una estadía perfecta. Ubicada justo frente a la playa. Como compañía especial, tuvimos a tres perritas adorables, territoriales pero amorosas, que cuidaban los alrededores y nos hicieron sentir aún más acogidos. La hospitalidad de don Jairo, el amable vecino, siempre estuvo dispuesto a ayudarnos con lo que necesitáramos, y Yuris, con su talento culinario y su calidez, nos deleitó con cada platillo, manteniendo la cabaña en perfecto estado. Fue una experiencia inolvidable para toda la familia, especialmente para nuestro pequeño de 4 años, quien disfrutó cada momento y encontró en las perritas unas compañeras de juego maravillosas. Recomendamos Casa Uvita sin ninguna duda; es el lugar ideal para descansar, conectar con la naturaleza y vivir momentos únicos en un entorno privilegiado. ¡Volveríamos sin pensarlo dos veces!