Alojamientos para estancias largas en Lomo Grande

El alojamiento de lujo, más grande de lo que parecía en las fotos y muy bonito. Muy recomendable y además mola la experiencia de ducharse viendo la tele. Lo menos que nos gustó es que estuvimos muy poco tiempo en él para llegar a disfrutarlo.

Me gustó mucho estar aquí. El departamento era solo de mi agrado. La ubicación era muy tranquila en un pequeño asentamiento. A solo 5-10 minutos a pie, estabas en un pueblo más pequeño donde podías conseguir comida adecuada. Hay mucho estacionamiento frente a la casa. Con todo, solo puedo recomendarlo y también me gustaría volver en mis próximas vacaciones.

Sabíamos que la casa de Oscar y Elena era una pequeña explotación ecológica. No esperábamos que los animales fueran tan parte de nuestra estadía. Dali y Nute, los adorables perros, venían a pasar el rato todos los días, los amábamos. El burro era tan gracioso cuando le mostraste un plátano, corría hacia ti rebuznando, también lo amaba. La oveja insistió mucho en formar parte de cualquier procedimiento. Oscar nos dio huevos frescos de las gallinas, nos invitó a tomar las verduras que necesitábamos del jardín. Nos trataron como amigos en lugar de huéspedes, fue simplemente fabuloso. El alojamiento está muy bien equipado y nos dieron muchas delicias inesperadas como cerveza, vino y agua. La cama es cómoda, se nos proporcionó todo lo que necesitábamos y Oscar y Elena fueron muy receptivos cuando necesitábamos cualquier información. Nos recomendaron lugares, nos dieron indicaciones y Oscar hornea el pastel de chocolate y naranja más increíble, que fue recibido con mucha gratitud. También asistimos a la barbacoa familiar, en general, definitivamente volveremos.

El trato ha sido inmejorable, la atención por parte de Mónica ha sido impecable y es de agradecer la cercanía y la amabilidad con la que hemos sido atendidos. Sin duda alguna, si volvemos a Gran Canaria, no dudaremos en volver al mismo alojamiento.