Renta de cabañas vacacionales en Naranjito

Excelente estancia. Privacidad, paz y relajación es lo que se vive en este lugar. Es hermosa la cabaña con su toque romántico y una vista hermosa.

Hermosa ubicación. No se puede superar. Puedes oír el mar y estás a pocos pasos de una hermosa playa que no está abarrotada en absoluto. A mis hijos les encantó la pequeña bañera en el porche trasero, especialmente cuando estaba lloviendo. ¡Nuestra estadía fue mágica!

La ubicación de la cabañita es perfecta, aparte que está súper equipada con todo!!! Hasta freidora de aire, es pequeña pero perfecta, y si le ponemos el millón de estrellas que se ven gracias a la poca contaminación de luz que hay, y escuchar el viento en los árboles, no tiene precio, la recomiendo mil veces!!

Nos encantó el lugar súper romántico y armonioso

El lugar muy bonito, lo único es que en el cuarto principal la luz pega full a las 6 am, por lo demás,una cabaña muy linda

Lugar muy bonito para relajarse y desconectarse de la ciudad. El chalet está un poco cerca de la carretera principal, por lo que se escuchan los autos, pero nada que no sea tolerable. Habitación principal con una vista espectacular.

La casa rústica es perfecta para una escapada tranquila y privada. La casa es acogedora. La chimenea y el jacuzzi son excelentes adiciones a la casa. ¡Despertarse con la naturaleza es increíble! Volveré a hospedarme allí.

Excelente alojamiento en zona local, el mejor en que hemos estado durante nuestro viaje a CR. Como arquitectos hemos valorado mucho los detalles presentes en toda la estancia y sin duda repetiríamos. Muy recomendable

Excelente hospedaje le damos un 20 de 10, todos los detalles de la casa, la ubicación y el camino excelente, el papá de Mario nos atendió súper bien, tomar en cuenta que no hay wifi y la señal de celular por ratos es muy mala pero si sirven, pero en general volveremos a ir

Lindo lugar, la cabaña muy ordenada y limpia, para disfrutar las vistas, el anfitrión nos dió la información completa y pudimos relajarnos gracias a la quietud de la noche, muy recomendada

Pasamos un fin de semana en familia y todo estuvo perfecto! Sidney siempre estuvo atento a cualquier necesidad, sin embargo el lugar está tan completo, de fácil acceso a la propiedad, es fácil ingresar a la cabaña, sus instrucciones e indicaciones están tan claras que no es necesario “molestar” a Sidney! Es una cabaña encantadora, en cuanto llegas percibes el amor que se puso en cada detalle, rodeada de naturaleza y con una vista hermosa, durante tu estadía respiras paz y calma! Sin duda volveríamos una y mil veces! Creamos valiosos recuerdos en este espacio precioso!

Solo tengo una palabra para este lugar: ¡HERMOSO! La ubicación es el lugar perfecto para perderte un par de días. Puedes caminar por el lugar o hacer un recorrido con el operador local. Los vecinos son tan encantadores (llaman a la puerta para darnos algunos aperitivos de Pascua y helado casero), por lo que el lugar es extremadamente tranquilo y es posible que veas crestones desde allí. Acerca de la cabaña... no hay palabras, las imágenes no dan suficiente crédito al lugar, tiene mucho espacio para toda una familia. Internet funciona perfecto, lo que lo hace ideal para los nómadas. Prepárate para noches menores de 10°C y días frescos, trae suficientes alimentos y bebidas porque no hay tiendas cerca. Atención: estarás en un municipio rural, así que no culpes al lugar por los insectos y los ruidosos pájaros cantores... ¡los estás invadiendo! La nevera es demasiado pequeña, definitivamente es algo para mejorar, personalmente nos encantaría algunas lámparas ambientales en la sala de estar y las habitaciones, y las mesitas de noche a los lados de la cama. OTRA COSA... ¡NO DUDES EN IR ALLÍ!

Un lugar muy acogedor, justo el lugar indicado para desconectar del día a día y respurar tranquilidad.

Volvería muchas veces, es un lugar muy lindo y cálido, con hermosos paisajes. Es la segunda vez que voy y Damaris siempre ha sido una excelente anfitriona, muy proactiva y amable, respondiendo rápidamente a todas las preguntas que me han surgido sobre el alojamiento. Muchas gracias!

Luis fue un anfitrión maravilloso. Muy atento y receptivo, y no tuve problemas para responder a nuestras preguntas a pesar de la barrera del idioma. Todas las necesidades estaban disponibles, así como los extras que no esperábamos. Su familia incluso nos dio un pequeño regalo de despedida para cada uno de mis hijos pequeños en nuestro último día. La casa está en una ubicación hermosa; algo difícil de encontrar al principio a través de las sinuosas carreteras de montaña, pero una vez que supimos dónde estaba, fue agradable tener un lugar tan privado. La vista es impresionante. ¡Tomar un café por la mañana en el patio con vistas al valle fue mi parte favorita de nuestro viaje!

Excelente anfitrión, cabaña impecable y muy buena comunicación. La vista espectacular.

Tuvimos una estancia increíble aquí. Caminar por un increíble jardín junto al Parque Nacional Marino Ballena por la mañana se sintió como el regalo más grande. Escuchar monos y guacamayos desde la terraza fue una inmersión total en la naturaleza. Necesitaba caminar para ver la piscina, la lavandería, la terraza, las zonas de estar exteriores, etc. Nuestra cabaña en el Oasis de Uvita fue una mezcla perfecta de comodidad y conveniencia. Con excelente aire acondicionado y WiFi, tenía todo lo que necesitábamos para una estancia cómoda. La cocina bien equipada nos permitió ser completamente autosuficientes. Aunque hay varias áreas de estacionamiento privado en Uvita Oasis, la cabaña tenía su propio espacio de estacionamiento bien protegido del sol. Milena, nuestro punto de contacto dedicado en Uvita Oasis, fue excepcional. Organizó rápidamente una excursión de un día a Corcovado en un par de horas y siempre fue rápida en sus respuestas, asegurándose de que se cumplieran nuestras necesidades. 100% recomendable

Hermosa cabaña en las montañas frescas. Acabados de alta gama y atención al detalle. Fácil comunicación. Definitivamente regresaría de nuevo. ¡Gracias Ana Victoria! 🥰

Fue una estancia increíble, fue hermosa y muy tranquila para que vivas, lo recomendaría a cualquiera que quiera probar un hogar en las montañas.

Muy lindo lugar, excelente atención y comunicación de Jorge y nos encantó el tour de fresas. Volveremos! :)

Tuvimos una maravillosa experiencia. Amamos adentrarnos en la montaña, conocer caminos nuevos y menos transitados, y llegar a ese pequeño paraíso donde todo fue diseñado con mucho amor. El entorno con sus flores, que atraen muchas mariposas, la huerta, de la cual tomamos algunas hierbas aromáticas para hacer nuestra comida. Conectamos con el silencio, con el viento entre los árboles, con las estrellas, que extrañamos ver en la ciudad, y con los bichitos de luz que nos visitaron una noche. La cabaña es muy acogedora y está perfectamente equipada para que la estadía sea placentera: agua caliente, tres calentadores, buenas cobijas, una cocina con todo lo necesario, hermosas ventanas (disfrutamos muchísimo la vista de la habitación con la cama matrimonial). Que no hubiera tele, wifi o señal de teléfono fue una ganancia en la conexión entre nosotros: jugamos juegos de mesa, leímos, cocinamos juntos. Combinamos todo esto con caminatas por algunos de los tantos lugares que ofrece la zona.

Precioso lugar en el medio del tropico. Vimos todo tipo de flora y fauna, además del espectacular río y pozas. Sabina y su esposo son excelentes ayudantes y hasta guineos nos regalaron. Simplemente fabuloso!

Alojamiento bueno, desde allí está a poca distancia de los parques naturales circundantes

¡Tuvimos un total de ocho, una verdadera reunión familiar! Los alojamientos eran súper, los aires acondicionados estaban a la altura del trabajo y el espacio de estacionamiento doble acomodaba fácilmente el Yukón GMC que alquilamos para transportarnos por todas partes. (Sin embargo, la "alegría" de conducir y estacionar esa monstruosidad en el tráfico de la zona turística de Costa Rica...) Hay un montón de gabinetes incorporados para que podamos desempacar. Las cocinas estaban bien equipadas y las usamos principalmente para desayunar. A los nietos les encantó la piscina, que está bien mantenida. ¡A media cuadra hay una pequeña tienda de comestibles y un súper restaurante/bar con una gran vista! ¡La comida también es genial! ¡Fue un placer poder llegar a The Happy Pig sin lidiar con el Yukón! Las lavadoras son súper, ¡realmente actualizadas y de alta capacidad! No hay secadora, lo que sospecho que tiene más que ver con el servicio eléctrico disponible que con cualquier otra cosa. El secado al aire funciona bien, pero si está lloviendo, solo deberías traer el secarropas al baño. ¡Gran anfitrión y personal!