Densas montañas cubiertas de bosque con árboles que se elevan y rodean el camino. Entre la inmensidad del Parque Braulio Carrillo se esconden tesoros poco visitados, como volcanes, cataratas vírgenes y senderos. Todo, dentro de un entorno decorado por el verde intenso, que en ocasiones parece infinito.

Los canales son la puerta al paraíso del ecoturismo. En una lancha pequeña se recorre con calma el humedal, sobrevolado por decenas de aves y resguardado por reptiles. El destino final es un parque virgen en donde anida la tortuga verde, abundan senderos y rutas para navegar en canoa.

La magia de la cultura afrocaribeña se respira en los alrededores de este antiguo puerto, reflejado en platos culinarios únicos, como el rice and beans, vestimentas coloridas, el ritmo del calypso y el sonido de las olas cuando mojan la arena color 'oro'.

Monos juguetones y simpáticos perezosos; un sendero frente a la costa, palmeras recostadas sobre la playa y un arrecife de coral escondido entre el mar cristalino. En Cahuita, la abundancia natural hipnotiza... pero no se duerma, que un mono aullador puede columpiarse cerca suyo.

Talamanca es un híbrido. En las montañas, la cultura indígena Bribrí resguarda costumbres propias, como el cultivo de plantas medicinales y la elaboración de chocolate artesanal, pero en el pueblo de Puerto Viejo se creó un entorno armonioso, con paradisíacas playas, surf y deliciosos platillos caribeños.

La esencia de Waldy y Jenny nace de las raíces de sus ancestros. Él es un indígena bribri; ella, en cambio, proviene de la tribu cabécar. Curiosamente, el abuelo de Jenny fue criado por una pareja de jamaiquinos que le enseñaron inglés y, a la postre, le permitieron a la joven aprender el idioma también. Hoy en día, esta pareja de emprendedores trabaja en su proyecto de turismo rural comunitario, que le permite a los viajeros aprender a fondo la cultura bribri dentro de la propia reserva indígena.

Con una conversación amena y auténtica, Danilo le cuenta a los viajeros de todo el mundo las historias y tradiciones de la tribu indígena bribri. En un alojamiento cómodo y con un diseño que refleja la esencia ancestral de la tribu, busca el crecimiento social de su pueblo. Al mismo tiempo, contribuye con los agricultores en la siembra de cultivos orgánicos de cacao, banano y maíz.

Un buen café es la razón perfecta para empezar una buena charla. Y para Maurizio es sencillo conocer a los viajeros encantadores que se enamoran de Puerto Viejo. En inglés, español o italiano, recibe a los turistas siempre con un trato atento y los invita a disfrutar de su céntrico alojamiento, ubicado muy cerca de la playa.